La manta Infrarroja y el ejercicio
- Luisa Lane
- 18 oct 2016
- 3 Min. de lectura

Vivimos en una sociedad, bueno un mundo en realidad, donde verse bien juega un rol muy importante. Entonces, visitas a la peluquería, al Spa y al gimnasio son cosas del día a dia. Como dicen todos los médicos y especialistas en bienestar general, con ejercicio diario y una dieta balanceada nos encontraríamos todos en buenas condiciones de salud. Tendencias como el crossfit, funcional, kickboxing, Muai Tai, pilates, entre otros, están aumentando el interés en el condicionamiento físico.
A qué viene todo esto? Al realizar ejercicio físico, nuestros músculos pueden pasar por DOMS (por sus siglas en ingles). Esto es la aparición tardía de dolores musculares, que suele suceder luego 24 a 48 horas de haber puesto nuestros músculos a trabajar de manera intensa y con ejercicios nuevos. Cuando hacemos ejercicio, nuestros músculos pasan por un estrés físico. Se crean pequeñas roturas microscópicas en las fibras musculares y son indicadores de que los músculos se están adaptando a un régimen de ejercicio. Las células que se activan en este proceso, van directamente al área afectada y maduran a células que crean nuevos filamentos de proteína muscular. Esto aumenta la fuerza y el tamaño del músculo, preparándolo para enfrentar actividades físicas.
Todos sentimos dolores musculares luego de hacer ejercicio, por mas leve que sean. Existen varios métodos de recuperación muscular muy eficientes. Uno de ellos descubrimos que es el sauna infrarrojo. Según estudios, como el calor infrarrojo penetra entre 3 a 4 centímetros por debajo de la piel, este tipo de sauna ayuda a que los vasos sanguíneos se dilaten. Esto genera alivio y relajación de los músculos y tejidos blandos por la circulación de sangre oxigenada a los mismos y las articulaciones.
Según Infomed (1) los efectos fisiológicos del calor infrarrojo no visible en cuanto a los músculos son los siguientes: • Se presenta un efecto antinflamatorio, debido al mayor aporte de nutrientes y células defensivas, proporcionados por la hiperemia, estimulando el trofismo celular y tisular. • Se produce relajación muscular por lo que prepara el músculo para el ejercicio, con un efecto antiespasmódico sobre la musculatura lisa, así como el aumento de la velocidad de conducción de los nervios periféricos. • Se produce una sedación y relajación generalizada de todo el organismo, debido tanto a la acción del calor ligero sobre todas las terminaciones nerviosas como a la relajación muscular sistémica.
Concluyo dando una opinión personal con respecto a los efectos del sauna infrarrojo en una persona que realiza actividad física regularmente. Si lo hago antes, me da mas flexibilidad a la hora de hacer los estiramientos previos al ejercicio, preparándome mejor para el entrenamiento. Si lo hago después o inclusive al terminar la semana, siento que toda la tensión que podría haber generado por el ejercicio desaparece. Así, puedo enfrentar otra semana de actividad física totalmente regenerada y relajada. Personalmente, no recomiendo hacerlo mas de tres veces por semana a no ser que tengan algún evento en especial para lo que no recomiendo mas de 5 de seguido. Si se hace una vez por semana ya sentirán un gran alivio y si lo hacen con constancia verán como sus cuerpos experimentan otros cambios a la par.
Bibliografia
1."Radiaciones Infrarrojas Y Ultravioletas." Medicina De Rehabilitación. Ed. Leovy E. Semino Garcia. Centro Nacional De Información De Ciencias Médicas, n.d. Web. 10 Oct. 2016.